Como una forma de cumplir con lo indicado en la ley N°21.156, que establece la obligación de los establecimientos educacionales de disponer de desfibriladores externos automáticos portátiles (DEA) en sus instalaciones, el Colegio adquirió y distribuyó seis de estos aparatos en distintos sectores con el propósito de reaccionar de manera rápida y con el equipamiento necesario ante situaciones de reanimación cardiaca que puedan presentarse en el lugar.

La inversión de los DEA, cuyo monto bordeó los nueve millones de pesos, viene a complementar la capacitación efectuada hace una semana por la totalidad de los funcionarios del CTI Don Bosco, quienes a través de un curso que se llevó a cabo mediante la modalidad teórico-práctica a cargo de Cardioprotegido, pudieron conseguir los conocimientos y herramientas básicas para enfrentar emergencias asociadas al vital órgano.

Respecto a las características del desfibrilador, en su concepto, es la aplicación de descargas eléctricas al corazón, donde su utilización en los primeros minutos del colapso, permite el aumento significativo de las posibilidades de supervivencia del paciente.

Cabe destacar que para el conocimiento de la Comunidad Educativo Pastoral, los desfibriladores han quedado ubicados en los siguientes espacios del colegio:

1. A un costado de la oficina del Centro General de Padres y Apoderados.
2. A un costado de BiblioCra.
3. A un costado del Salón de Reuniones San Juan Pablo Segundo.
4. A un costado de la Aula de Recursos PIE.
5. Frente a la sección de Pañol que se ubica en el Taller San José Obrero.
6. Ingreso lateral norte del Gimnasio Techado.